Por: Julio Torres.-El día cuenta con 24 horas lo que permite dividirlo en tres partes de ocho horas cada una, y utilizar cada parte con la actividad productiva necesaria para que se pueda aprovechar al máximo cada esfuerzo.
Una manera efectiva de utilizar cada segmento de ocho horas puede ser utilizar las primeras ocho horas el trabajo productivo, el que proporciona los medios necesarios para subsistir.
Las siguientes ocho horas deben utilizarse en el descanso que puede contener varias actividades como puede ser el estudio de algún curso necesario, o simplemente disfrutar de un merecido descanso.
El tercer segmento se destinará a las horas de sueño, es decir, el maravilloso tiempo de dormir donde nuestro subconsciente ocupa el tiempo para nuestro archivo personal.
Una práctica que pienso puede ser muy efectiva es comparar cada hora de la distribución descrita como una pulgada que es la medida inglesa, lo que se traduce en una regla de 24 pulgadas dividida en tres segmentos de ocho pulgadas cada una.
Pueden ser también 24 centímetros pero, me temo que hacerlo con la medida de la pulgada suele mostrarse mejor explicación, pues no existe una medida de 24 pulgadas en el uso común y eso permite marcar una diferencia que no pueda ser olvidada.
Cuando hablamos del segmento de sueño, es prudente no tomar el hecho de que debemos dormir exactamente ocho horas, pueden ser menos, eso está determinado por la edad de cada quien, los niños suelen dormir más tiempo.
Lo mismo ocurre con el tiempo de descanso, cada persona debe dar a este segmento la variedad de actividades que mejor le ajusten, pero desde luego una buena recomendación puede ser el ocupar un poco de tiempo en actualizar el nivel profesional.
El segmento relativo al trabajo resulta difícil modificar porque está sujeto a la ley del trabajo de cada lugar y como se trata de la fuente de riqueza familiar, considero que es muy importante entregar la mejor de las intenciones para cumplir la tarea asignada,
También se ha designado a esta división en tres segmentos como la regla de 24 pulgadas por la sencillez que muestra el tema, con lo cual se intenta hacer conciencia de la necesidad de ejercer una disciplina en las actividades de cada segmento como muestra de disciplina.
Está comprobado que el seguir un sistema como el descrito hace que la persona que lo practica paulatinamente logra la disciplina necesaria para su vida diaria, lo que redunda en un progreso personal de características especiales.
Después de estudiar este tema por varios años llego a la conclusión que es una buena manera o un buen sistema de disciplina y los resultados han sido estupendos.
Es posible que de ahora en adelante, hablar de la regla de 24 pulgadas sea más sencillo que tratar de estructurar un itinerario para cada día, resulta más sencillo comenzar de nuevo cada día que buscar un nuevo orden cada día.
El número tres suele ser un principio filosófico efectivo, por lo tanto sugiero se tome en cuenta al diseñar formas de comportarse en la vida social con el fin de obtener éxito en todo aquello que se implemente para bien de todos.
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