jueves, 4 de agosto de 2011

Almas errantes como leyenda







Por: Julio Torres. La pregunta que me hicieron es que si las almas errantes son felices y ese es el motivo de este reportaje, y podría contestar que mas o menos, pero eso está supeditado a sus méritos, porque todo dependerá de sus intereses.

Repetiré que como arriba es abajo, la felicidad es muy subjetiva, es como preguntar si tiene progreso un alma errante, en primer lugar, tanto arriba como abajo, para ser feliz es necesario querer ser feliz, para progresar también es necesario desear ese progreso, nada es producto de la casualidad, todo conlleva un trabajo.

Debemos tomar en cuenta que tanto para ser feliz, como para progresar lo que necesitamos primero es un cuerpo físico donde se pueda manifestar ese deseo de ser feliz para progresar o progresar para ser feliz,

Es por eso que en uno de los reportajes dejé muy claro el concepto alma-espíritu, con el fin de separar uno y otro, entonces dijimos que el concepto espíritu se refiere al encargado de vigilar la fisiología adecuada para cada una de las partes que conforman nuestro cuerpo y que permanece con nosotros desde el momento de la concepción y hasta la muerte.

El concepto alma es el encargado de proporcionar a ese cuerpo el poder de la voluntad y la manera de ser de la persona y solo entra en funciones cuando por medio del aire se introduce en el cuerpo, cuando está saliendo por el útero y toma la primera aspiración es el momento en que obtiene el aliento de vida y se mantendrá ahí mientras el cuerpo comandado por el espíritu así lo disponga y entonces, finalmente se presentará la expiración o muerte.

Se dice que las almas sufren como nosotros en esta vida, las consecuencias de las pasiones, y que son felices cuando están sin materia, porque se pueden trasladar a todos lados sin el compromiso de comprar su boleto de viaje.

Que al separarse del cuerpo, no está por ello totalmente desprendido de la materia, y pertenece aún al mundo en que ha vivido, o a otro del mismo grado, a menos que, durante la vida, no se haya elevado, y este es el fin a que debe dirigirse, pues sin el, no se perfeccionaría nunca.

Puede, sin embargo, ir a ciertos mundos superiores, pero estará en ellos como un extraño, por así decirlo, no hace más que entreverlos, lo que le despierta el deseo de mejorarse, para ser digno de la felicidad que en ellos se goza, y poder habitar en ellos después.

Las almas purificadas, vienen con frecuencia para ayudarles a progresar, pues de no ser así, tales mundos estarían abandonados a si mismos, sin guías que los dirigiera.

Existen mundos consagrados en especial para almas errantes, mundos en que pueden habitar por un tiempo, como una especie de campamento para descansar de una prolongada búsqueda, que siempre es algo penosa.

Son posiciones intermedias y transitorias entre los otros mundos, graduadas según la naturaleza de las almas que pueden ir a ellas, las cuales gozan de mayor o menor bienestar, imaginemos que son como aves de paso que se detienen en una isla, esperando recobrar fuerzas para dirigirse al término de su viaje.

Es posible que existan muchas opiniones distintas a la expuesta en este tema, sin embargo, el tema es muy atractivo y cada vez que lo trato, encuentro muchas más respuestas, o quizás muchas dudas que no encuentro respuestas inmediatas.

Pero doy gracias de pertenecer al género humano porque solo nosotros hemos sido premiados con el poder del pensamiento y de la imaginación y lo menos que podemos hacer es utilizar ese poder para transmitir a nuestro nivel lo que hemos aprendido.


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