lunes, 21 de noviembre de 2011

Escribiendo en la arena

Las personas muestran una gran facilidad en recordar lo que les hace daño y olvidan también con gran facilidad lo que les hace bien, eso es lo que escriben en la arena, pero lo malo parece que buscan grabarlo en un metal fuerte y duro y que no se borre.

Un gran proyecto podría ser, que quienes han trascendido los umbrales de este mundo, y que ahora en el mundo donde se encuentran pudiera transmitir con la tecnología actual sus experiencias vistas desde ese plano.

Que de alguna manera se convocaran ruedas de prensa o seminarios, que resultarían altamente educativos, permitiéndonos descubrir mecanismos adecuados y no cometer los mismos errores que de manera consuetudinaria cometemos.

No sé, si se encuentran arriba o abajo quienes se han adelantado a esa otra vida, o tal vez ni siquiera imaginamos las coordenadas de ese lugar, pero debe existir como lo han afirmado muchos pensadores importantes de todos los tiempos.

Es posible que en estos tiempos mucha gente esté preocupada por buscar por medio de la fe, o por métodos mentales o de espiritualidad, un camino que les oriente hacia el encuentro de la felicidad como cada uno lo entienda.

También habrá quien pueda ser feliz ignorando todo, hasta se pudiera decir que quien no piensa es más feliz, sin embargo, creo que no es lo ideal andar por la vida sin saber la razón de vivirla, es muy importante preguntarse: ¿De dónde vengo y adónde voy?

Puede haber personas que no busquen respuestas sobre su propia vida, pero cuando ya estamos transitando en esta vida, debemos buscar el camino de la búsqueda y armarse de paciencia y así encontrar las respuestas a los “porqués”.

Una vez que entramos en el camino de la duda, no se puede salir de él, quedamos atrapados por saber más y más, de momento el camino resulta agotador, pero el premio es la riqueza interior que se obtiene, es lo que nos hace felices.

Platicar con las flores de un jardín es como platicar con personas, muchas veces he escuchado que quien logra platicar con las flores, recibe respuesta a sus preguntas de una manera difícil de explicar, pero que sucede y además resulta tranquilizante.

Un deber de todos nosotros es transmitir todos los conocimientos que la vida nos entrega por simples o lógicos que nos parezcan, todos somos dueños de cada descubrimiento, de cada concepto aprendido, y nuestro deber es divulgarlos en favor de todos.

Cuando hemos escuchado lo suficiente, se hace necesario transmitirlo, nada debemos guardar, porque nada es propio, todo es propiedad de todos, todos tenemos la habilidad de transmitir lo que aprendemos.

La parte material es importante y necesaria cuando se vive en este plano, donde todo tiene una forma y donde aprendemos que aferrarnos a una cosa material, solo podemos conseguir un buen Paquete de frustraciones.

Obtener dinero es bueno, lo que es malo es hacerse esclavo de ese dinero, el sufrimiento que se experimenta cuando ese dinero falta, es la desesperación, lo que no se entiende es que siempre existe la posibilidad de recuperar el dinero que se pierde.

Entendamos que las pérdidas materiales siempre hay posibilidad de recuperarlas, la prosperidad es para todos, simplemente hay que saber esperar.

En lugar de escribir en la arena, las cosas buenas que nos pasan, busquemos la forma de escribirlas en el metal más duro y resistente que ni el tiempo ni los elementos logren borrar las cosas maravillosas que nos han ocurrido, no más arena para nuestros escritos.

sábado, 19 de noviembre de 2011

El apego a lo material

Todos recibimos lo que nos corresponde, en algún momento, en alguna parte, de alguna manera esta definido, y es dado a cada uno de nosotros, el conflicto se presenta cuando no aceptamos lo que nos otorgan, siempre pensamos que no es suficiente.

El apego a lo material es el principio de la dependencia, el apego a lo material es una puerta de entrada a la esclavitud que no tiene cadenas, pero que atrapa, es como una venda que impide ver lo que se encuentra a unos pasos de nosotros.

Cuando se adquiere un producto que se ha estado deseando, lo mejor es disfrutarlo plenamente en su exacta dimensión, hay que recordar que nada es para siempre, lo importante es el día de hoy.

Por sistema sufrimos cuando falta el dinero, pero la rueda de la fortuna también se detiene por alguna causa desconocida, pero solo es por un tiempo, lo importante es no buscar culpables, aunque estos sean reales, lo mejor es no dispersar las energías.

En estas circunstancias es donde es aplicable aquello que entendemos como fe, aunque la fe  solo se comprenda como un concepto, pero ella nos acerca  a la persona adecuada que sin saber como, nos regala apoyo y afecto.

Debemos aceptar que todos tenemos momentos difíciles, de sufrimiento, y ese sufrimiento radica en tener la ilusión de apegarse a algo, la prosperidad y la abundancia sí existen, de ninguna manera es malo tener una buena posición económica.

Lo que esta mal es apegarse a las cosas a tal punto, que dichas cosas nos conviertan en esclavos, pues, lo que hoy nos proporciona satisfacción, mañana puede producirnos una tremenda frustración.

¿No es que siempre nos falten cosas? Porque cuando las conseguimos, siempre falta una más, y otra, y otra, esa es la cara de la esclavitud de que hablo, hoy tengo un carro que necesitaba, y cuando ya lo he disfrutado, comienzo a desear otro.

Ahora quiero uno más grande, porque en el actual, viajamos muy incómodos cuando salimos a pasear, pero, ¿Antes no teníamos un carro? Antes ni siquiera paseábamos, ¿Entonces? Tal vez, cuando sea el momento, cuando se necesita, se adquirirá uno más grande.

Si la familia no se encuentra entusiasmada, si su ánimo se encuentra a nivel del piso, es muy importante que le hagas saber que la unidad familiar es el principio, solo unidos se puede generar prosperidad, es necesario unir la energía de cada miembro de la familia y generar riqueza.

Pero riqueza en todo lo que abarca el concepto, la abundancia es como el agua en el océano, hay suficiente, todos tienen derecho a su porción, la diferencia es que hoy se puede contener en un recipiente pequeño y reunida la familia puede llenar un gran contenedor de agua.

El problema es que nunca sabemos cual es el verdadero tesoro que poseemos, es posible que sea lo que cada uno de nosotros tiene y nada más, resulta difícil aceptar que vivimos en una sociedad de competencia y consumo.

Como entender que, existan lugares donde la pobreza es extrema y la muerte es inminente, y sin embargo, las personas viven con alegría, a su manera, sus costumbres y su filosofía buscan la liberación tal vez de su alma, es posible que el desapego a lo material sea la manera de obtener la felicidad interior.

El secreto es aprender que la mejor vida es estar donde queremos, con quien queremos y aceptar lo que nos tocó vivir, con humildad, pero con coraje, comprender que la vida es un tiempo de aprendizaje, el desapego a lo material, nos convierte en eternos aprendices.

sábado, 12 de noviembre de 2011

Comprensión humana

La comprensión humana no es simple luz, es voluntad y afectos, el hombre cree con más disposición lo que preferiría que fuera cierto y rechaza cosas difíciles por impaciencia en la investigación.

Muchas veces soñamos que hablamos con nuestros padres que ya han muerto, y de pronto, inmersos todavía en la función del sueño se apodera de nosotros la abrumadora constatación de que en realidad no murieron que todo ha sido una especie de error.

Volvemos a vivir  aquellos momentos bonitos que tanto recordamos con todos los detalles de que somos capaces de recordar, pero cuando en verdad despertamos se emprende un proceso de lamentación.

Algo dentro de nosotros se afana por creer en la vida después de la muerte y no se experimenta el más mínimo interés en saber si hay alguna prueba contundente de que exista.

Por ejemplo, la mujer que visita la tumba de su marido y habla con él de vez en cuando, no es difícil de entender, aunque se tengan dificultades con el estado ontológico, es decir: esa característica y atributos de los seres en general, y en este caso del marido a quien le habla.

Se trata de que los humanos, se comporten como humanos, tal vez un tercio de los seres humanos que habitamos en el planeta hemos establecido contacto en algún nivel con los muertos.

Lo anterior no significa estar dispuesto a aceptar que alguien declara comunicarse con los seres queridos difuntos, sabemos hasta que punto realmente deseamos creer y ejercer un control entre lo que creemos y lo que no.

Entiendo de manera personal que esos sentimientos pueden hacerme presa fácil de una farsa  y hasta de un fraude poco elaborado, esto provoca que de mala gana recurra a mi escepticismo.

Muchas son las preguntas que surgen ante estos temas: ¿Por qué, alguien que ha perdido la vida a manos de un asesino, no nos dice como ocurrieron los hechos que nos permitan buscar la justicia?

Lo que se necesita entonces es que alguien proporcionara una prueba consistente, de que hay vida después de la muerte, con datos científicos que sean capaces de resistir el escrutinio del método científico.

Posiblemente sea mejor la verdad por dura y cruel que se presente, que una fantasía consoladora, pienso que los hechos pueden ser más productivos que la fantasía.

La afición por la muerte o por lo que significa, permanece en alguna parte del pensamiento, es parte de la comprensión humana, aderezada con los sentimientos y el recuerdo de quienes han partido.

Quizá la muerte no sea tan punzante como nos han hecho creer, si como lo han establecido muchos autores, que existe la posibilidad de comunicarse con nuestros seres queridos que ya han fallecido, habremos de esperar a que se puedan obtener datos científicos en este tema y entonces, hasta entonces trataremos de profundizar como se debe.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

El silencio del alma


“Busca tu silencio interior y podrás escuchar a tu alma”. Este es un pensamiento que he recordado en este momento, y me permito comunicarlo a usted, porque me parece que es sumamente importante tratar de entender de lo que se trata.

El silencio trabaja en el diálogo que ejercen todas las partes que componen nuestro ser interno, y solo cuando ese ser interno es capaz de comunicarse con el ser externo es que lograremos ese poder infinito que nos han entregado.

Muchas personas sufren cuando se encuentran solas por la causa que sea, temen hasta escuchar un simple ruido extraño, tal vez por no entiende que la soledad y el silencio son nuestros amigos de verdad.

Una práctica importante es buscar a esos amigos cada vez que se requiera conseguir un consejo, no dude que ellos estarán prestos a contestar el cuestionamiento que se les plantee, así se trate de un asunto muy complicado.

Cuando se le teme al silencio es porque no se le conoce realmente, cuantas veces pudo presentarse ese silencio y no le hicimos caso, pero él regresará siempre, no le importa ser rechazado, lo mejor es hacerlo amigo inseparable.

Si aprendemos a escucharlo, él siempre nos escuchará, debemos imaginarlo como una luz del alma ya que se conectará por medio de nuestros sentidos y se hará cómplice de nuestro inconsciente.

No debemos temer ni asombrarnos de que el silencio se encuentre tan informado de nuestra vida, ha estado con nosotros desde el momento mismo en que llegamos a este mundo, es al único que nunca vamos a poder engañar.

El consejo es: Quedarse quieto, respirar profundamente, cerrar los ojos y permitir que el silencio abra la puerta y penetre a nuestro interior, y una vez instalado, buscará el momento adecuado y manifestará la señal necesaria que solucionará todo aquello que nos aflige.

El miedo es lo que nos obliga a llenar los espacios, hablando todo el tiempo o buscando distractores eminentemente ruidosos, porque le tenemos miedo a ese juez interno que no necesita de un jurado para dictar sentencia.

Es muy poco lo que podemos escucharnos, tampoco escuchamos a quien nos da un consejo, es más, ni siquiera escuchamos el canto de los pájaros, el ruido de la lluvia, de que manera podríamos escuchar nuestro ser interno.

Lo más importante es sentir nuestro propio silencio, es tan fácil como sentir que estamos respirando, tal vez debamos dar nombre y apellido a ese silencio de que hablamos, ¿Será acaso, lo que conocemos como sexto sentido?

Mi recomendación es: No permita que algo o alguien impida o interfiera en el canal de comunicación entre su consciente y su yo interno, deje que le guie en todo, su yo interno nunca se va a equivocar, nunca buscará el engaño.

Como ejercicio de lo anterior, vale la pena que piense y practique lo siguiente: “Silencio, quédate conmigo todo el tiempo que sea necesario, permíteme escuchar, antes de que sea demasiado tarde”, ahora comprendo que el silencio certifica que sí existe mi alma.

martes, 8 de noviembre de 2011

El día en que cumplo años


Como un sueño imagino lo que puede ocurrir, cuando nos encontramos en algún lugar de este universo después del momento que conocemos como muerte, alguien se acerca y pregunta si recuerdo que día es hoy.

Es posible que en ese lugar el tiempo no se mida como lo hacemos en este lugar en el que ahora estoy escribiendo, aquí hay un tiempo de dormir y otro de levantarse e iniciar las actividades previstas o programadas.

Aquí todo tiene un momento, el de alimentarse, transportarse, y hasta el momento de hacer el amor, todo se rige por tiempos, somos esclavos de un aparato inventado hace muchos años llamado reloj.

Entiendo que el universo tiene su propio sistema de medir el tiempo y tal vez a la fecha ni siquiera hemos podido entender a conciencia como lo hace, tanto que a través de nuestro tiempo hemos tenido que hacer ajustes y tratar de imitarlo.

Imagino el estar en el plano en el que permanecemos después de la muerte, tal vez el tiempo  ni se mida de ninguna manera, pues se dice que el concepto eternidad allí toma dimensiones especiales.

Que pasaría si en ese lugar alguien me preguntara: ¿Recuerdas que fecha es hoy? Nada menos que el día en que naciste, pero, ¿Tendrá importancia ese hecho?

Alguien trata de comentar algo con el fin de hacerme pasar un rato agradable y me dice: Imagina que hoy tu familia te recuerda por la fecha en que cumplirías años, en este momento se encuentran a la hora del desayuno e imaginando tu actitud al respecto.

Desde luego que están tristes y sienten que la casa parece estar fría y oscura, uno de tus hijos rompe el silencio y dice: No iré a llevar flores al cementerio porque no creo que se encuentre  en ese lugar.

Tu otro hijo manifiesta que en realidad estas dentro de su corazón y que cuando desea comunicarse contigo, solo tiene que recordarte y mirar la foto que guarda en sus cosas personales.

Tu esposa llevará flores al cementerio y después de llorar un poco regresará y buscará la soledad para recordarte, ella también te extraña mucho.

No se si esto que estoy imaginando pueda ser verdad, solo intuyo que debe existir una forma de vida en ese lugar al que acudimos cuando termina nuestro tiempo en esta vida y lo que hago en este momento es disfrutar plenamente lo que recibo.

Estoy consciente de que así son las cosas, hemos de sortear tiempos buenos y otros no tan buenos, tal vez sea porque es la única manera de apreciar los buenos es cuando experimentamos los otros.

Lo importante es, creo, imaginar que existe un lugar a donde permanecemos después de la llamada muerte, y prefiero imaginar que tendré la oportunidad de regresar algún día y corregir lo que no supe hacer adecuadamente en esta ocasión.

Si eso es como lo imagino, entonces, acepto que ocurra lo que tenga que ocurrir, mejor concentro mis pensamientos en lo que estoy viviendo en este preciso momento y que venga lo que tiene que venir.

Hoy comienzo el día con una sonrisa y a enfrentar los dragones que se me pongan al paso y derrotarlos por mi propio bien y dar a mi familia lo mejor de mí, solo por hoy, mañana será otro día.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Miedo a lo desconocido

Comentan personas que han estado en una cama de hospital,que paulatinamente van sintiendo miedo de acuerdo a las visitas periódicas tanto de los médicos como de las enfermeras.

Personalmente experimenté un determinado miedo cuando los médicos no se ponían de acuerdo con mi caso,unos opinaban que debía ser intervenido quirurgicamente y otros negaban esa posibilidad.

Traté de mantenerme lo más tranquilo posible ante tales indecisiones, que se propolgaron a unas diez horas,hasta que apareció un médico especialista y de avanzada edad, quien de inmediato realizó un
diagnostico y descalificando todo.

El me pregunta, si tengo la posibilidad económica para un estudio especial y como la respuesta fué afirmativa,se concretó a indicarme que en el momento de tener en mis manos esos resultados, me esperaba en su consultorio.

Una vez adquiridos los estudios los revisó uno a uno y debo admitir que casi me vi regresando a la vida sin siquiera saber como o porqué, el especialista simplemente casi me corrió de su consultorio asegurando que nada estaba mal en mi persona.

La pregunta sería en este momento:¿hay personas que no tienen miedo? debo admitir que hubo momentos en que sí sentí miedo,pero en realidad no comprendo como era ese miedo,tampoco puedo entender a que le tenía miedo.

Dicen que el lugar donde se instala el miedo es en el inconsciente al lado de las sensaciones y si no nos damos cuenta,se comienzan a alimentar las dudas y se transforma en una voz interior que simplemente dice:"No vas a poder".

Se puede recurrir a alguien en busca de ayuda, pero la voz va a susurrar:"te van a decir que no" y entonces esa voz se apodera de la debilidad nuestra,incrementando los hechos hasta provocar el miedo.

Aunque parezca un fantasma, esa voz es real, como todo lo que nos rodea en la vida, pero solo depende de nosotros mismos, transformar,dominar,suspender y vencer con el fin de superar lo que esa voz casi fantasmal nos provoca.

La solución es tomar conciencia de que está en la mente el primer paso,en efecto,el miedo está dentro de nosotros y no es afuera donde se encuentra, el consejo será abrir otro canal interior que nos permita aprender a decir no,y quitarle el poder.

A la fecha no se como explicar a que le tengo miedo en verdad, si es el miedo a morir,no puedo explicar exactamente a que le tengo miedo,a veces pienso que es miedo a dejar a la familia,pero luego recapacito y digo:Ellos resolverán en lo que deben hacer.

En realidad los familiares aprenderán a hacer las cosas por si mismos,entonces no se realmente a que le tengo miedo y lo que es claro es que con miedo nada puede salir bien.

A partir de hoy,me he propuesto nunca más tener miedo,espero cumplir con esta promesa, de lo contrario, creo que nunca podré superar ese miedo.

domingo, 30 de octubre de 2011

Cuando vuelva

Mucho se ha escrito sobre el tema de, si en verdad existe un regreso a una nueva vida o a una nueva encarnación, y cuando ocurre el fallecimiento de un ser querido, se incrementa de manera considerable esa posibilidad.

Tal vez el tema resulte muy polémico, pero no deja de ser importante reflexionar sobre él sin ánimo de parecer reiterativo, simplemente, aplicar la libertad que nos es otorgada por el simple hecho de ser parte de este universo.

Personalmente, no considero que al morir todo se pierda, no acepto esa lógica, tampoco acepto lo ofrecido por las religiones que aseguran la vida eterna, porque entonces que caso tiene el sufrimiento de la vida.

Se dice que el cuerpo humano es una especie de cárcel, además debemos aceptar con resignación la suerte o la vida que nos ha tocado vivir, pero en lo personal también me parece injusto.

La pregunta es: ¿Por qué a mi vecino todo le sale bien y a mí todo se me dificulta? ¿Qué es lo que ha hecho mi vecino y como supo lo que debía hacer?

Como vemos, estas y otras preguntas son las que se encuentran en el aire y la verdad no creo ser el único que presente estas dudas, entonces, eso me obliga a buscar respuestas convincentes y no respuestas que me obliguen a ejercer un acto de fe.

La aceptación de la voluntad divina la respeto, pero no estoy de acuerdo, lo que me deja la vida a estas alturas, es que me he equivocado muchas veces, lo cual ha sido la causa de la ausencia de los triunfos necesarios para mi proyecto de vida.

Puedo asegurar sin temor a equivocarme que siempre he hecho las cosas buscando el bien y la tranquilidad de mis seres queridos y la de mis amigos, solo que en ese caminar he tenido que equivocarme de acuerdo a las circunstancias, eso es lo que ha retrasado el triunfo.

La pregunta es entonces: ¿Qué hacen quienes si triunfan y logran lo que han imaginado?, ¿Quién les ayuda y porque no me ayuda a mí? ¿Qué me falta por hacer?

Oportunidades han sobrado, pero por sistema ha ocurrido que en el último minuto resulto desplazado con métodos no esperados, y tengo que conformarme con los resultados no favorables.

Sin embargo, creo que debe haber una respuesta a mis interrogantes pero no las encuentro, he tomado la determinación de aceptar las cosas como se presentan, hoy entiendo que eso es lo que debo aceptar para vivir.

Por lo pronto he decidido no preocuparme más de este asunto, me propongo diseñar lo que puede ser mi regreso, que cada día que pasa, la seguridad de que regresaré se incrementa con esperanza de corregir lo que en esta oportunidad ha fallado.

Estoy convencido de que regresaré, estoy convencido que a mi regreso me equivocaré menos, estoy convencido de que de alguna manera utilizaré un “apuntador electrónico” o de cualquier tipo, que me permita escuchar con claridad el próximo guión de mi vida.

Estoy convencido de que cuando vuelva, de alguna manera cumpliré lo proyectado en esta, y por lo pronto, pido perdón a quienes perjudiqué de alguna forma, solo declaro que si cometí faltas, nunca lo hice con dolo o mala fe.

martes, 25 de octubre de 2011

La felicidad

La felicidad esta presente siempre, solo que parece que muchas veces no la vemos, o no la queremos ver, la felicidad significa paz y forma parte de una palabra mágica pero también efímera.

¿Qué pasaría si después de cruzar la línea de la vida nos ofrecieran la felicidad? Es posible que tal cosa la calificaríamos de aberrante ya que entender que después de perder la vida se reciba una oferta de felicidad no es congruente.

Sin embargo, nada impide que imaginemos esta situación ficticia y por que no aprovecharla para meditar un poco sobre el tema y aprovechar el momento para hacer una reflexión sobre la felicidad.

Tal vez el reclamo sería: ¿Por qué no me dijeron como ser feliz durante mi vida y porque me lo dicen ahora que ya no puedo disfrutar la felicidad en ningún nivel?

Generalmente las personas que no disfrutan la felicidad es por que no se detienen a pensar que es el proyecto más sencillo que existe y que no importa la preparación que tenemos, solo necesitamos atrevernos a ser felices.

La mayor parte del tiempo lo ocupamos en calificar nuestra vida como gris, saturada de crisis y luchas sin resultados aceptables, con alegrías no recordables y que las tristezas ocuparon la mayor parte de nuestro tiempo.

Es comprensible desde cualquier punto de vista que ese sea el pensar de la mayor parte de los seres humanos, pero el asunto es que de alguna manera se nos envían señales que nos indican el camino hacia esa tan ansiada felicidad.

Captar esas señales parece que son extremadamente difíciles de percibir y si se pudieran aceptar sin reserva, verlas y calificarlas, de inmediato para ponerlas en práctica     es la mejor de las recomendaciones.

Indudable es que aceptar cualquier percepción es más efectivo que rechazarlas sin meditar, muchas veces ocurre que la persona más insignificante nos puede proporcionar la mejor solución a nuestros problemas, pero no lo aceptamos por la descalificación que hacemos de esa persona.

El barrendero, el aseador de calzado, la persona más humilde que se nos coloca frente es tal vez el enviado a transmitir un mensaje y no lo escuchamos porque no lo entendemos calificado como emisor de un mensaje.

Cabe en este momento aquel pensamiento en el que se asegura que el maestro aparece cuando el alumno esta preparado para recibir el mensaje.

Vale la pena que a partir de este momento se pregunte: ¿Ha sido usted feliz?

No me conteste, tómese el tiempo que crea necesario, solo piense en los momentos que considere que ha sido feliz, yo le aseguro que ha experimentado más momentos felices de los que imagina, solo haga su lista y por un momento olvide lo malo que le ha sucedido.

Su felicidad esta más cerca de lo que imagina.

domingo, 16 de octubre de 2011

Un mundo raro

Una suave brisa envolvía el cuerpo de nuestro personaje que identificaremos como José, esa brisa lo envolvía como si lo acariciara con ternura, y un suave perfume completaba el cuadro de bienestar.

José despertó y permaneció estático unos instantes que se prolongaron varios minutos, se sentía bastante tranquilo, pero en el fondo deseaba comenzar a aceptar lo que estaba pasando y lo que tendría que suceder a futuro.

De pronto se escucharon golpes en la puerta, se levantó con sobresalto, fue a abrir la puerta y queda frente a él un hombre con aspecto tranquilo que le extiende la mano en señal de saludo y solo se concreta a decir: ¡Acompáñame José!

Con cierta timidez José, cuestiona al personaje manifestando: ¿Puedes decirme a donde vamos? Supongo que no me dirás, ¿Cierto?

Caminaron por distintos jardines, todos ellos bastante grandes y con un gran número de flores que nunca antes había visto en tal cantidad de ellas y de todas las especies.

Sin saber de donde aparece un hombre de gran estatura y con presencia poco usual, una túnica blanca cubre la mayor parte de su cuerpo, y muestra en un momento dado, una sonrisa que se antoja muy cálida.

Comienza a hablar y además de su estatura muy alta, se le aprecia muy tranquilo, que agregado a su presencia, coincide su tono de voz que es suave y dulce.

Hola José, soy tu maestro a partir de este momento, espero que nuestra relación resulte provechosa para ambos, te aseguro que por mi parte estoy consiente de quien eres y como eres, de manera que te invito a seguirme hasta que encuentres tu camino.

La misión que me fue encomendada es enseñarte todas las mañanas algunas lecciones de vida, que desde hace mucho tiempo debiste aprender pero lo ignoraste, ahora es el momento oportuno para que aprendas.

Llegas un poco tarde, no tiene sentido todo lo que me está pasando, ya estoy bastante crecidito para que me quieras enseñar lo que debo hacer, eso me lo hubieras dicho hace unos treinta o cuarenta años antes.

Nunca es tarde José, mira, todo el tiempo estamos aprendiendo algo, a partir de hoy vas a conocer un nuevo mundo, estoy seguro que lo vas a disfrutar mucho, ahora vas a realizar cosas que nunca antes has experimentado.

No debes preocuparte, todos reaccionamos de la misma manera cuando nos encontramos en este punto, yo hice lo mismo cuando ingresé a este lugar, pero estas son las leyes.

Vas a recorrer un camino y al final sabrás porque lo hacemos, pero también cuentas con otras opciones, aquí no se obliga a nadie a hacer lo que no quiere.

¿Existe otra opción? Y si es así, desearía estar con mi familia ahora mismo; el maestro entonces le responde con cierta rapidez: No, esa no, ya es tarde, te explicaré, puedes deambular por todo el cielo, sin la obligación de escuchar a ningún maestro.

Tú elige, pero escucha muy bien mi consejo: Si eliges estar libre, te perderás el final y sería una pena, tú sigues siendo libre, tal como lo eras mientras vivías, sigues teniendo el libre albedrío que te dieron cuando crearon tu alma.

¿Entonces, este es el cielo? ¿Ya no hay marcha atrás? Y la respuesta fue: Ya no.

viernes, 14 de octubre de 2011

La gran aventura

De esa manera está calificada la estrategia del regreso a la vida y como si se tratara de una sala de espera, así lo describen quienes de esto saben mucho, aseguran que somos nosotros mismos quienes solicitamos el regreso, lo cual para mi guasto tiene congruencia.

De ser cierto lo que se cuenta en este terreno, sí le encuentro aceptación, pues solo conociendo la experiencia de haber estado en este plano, es que podemos solicitar un regreso con el objetivo que sea.

Tal vez, siempre queda o debe quedar una especie de asuntos pendientes que se deben completar o corregir con la oportunidad de un regreso, eso es lo menos que podemos esperar como justo en la aventura de vivir.

La organización en la sala de espera parece desarrollarse en completo orden, quien lo narra asegura que nada tiene que ver con las terminales de aeropuertos o de autobuses donde muchas veces se presentan conflictos por adelantar la posición de espera.

Otro dato indica que es posible ver lo que podemos interpretar como caras conocidas que posiblemente emprendan el viaje al mismo tiempo pero en distinto vehículo, es decir, la elección de los padres.

Otras veces, se asegura que inclusive alguien puede retrasar su viaje con el fin de lograr una especie de sincronización con la esperanza de hacer fácil el reconocimiento con determinada persona, una vez que hayan ingresado a este mundo.

Desde luego, parece que el encuentro con una personalidad amada o con probabilidades de amarla, si es parte del camino, ni dudar que se encuentren en las mejores condiciones.

Existe coincidencia en la descripción de algunos autores, que el viaje hacia la vida es como ver una estrella caer en el espacio, lo que describimos como una estrella fugaz, para luego perderse en el infinito.

Otros autores afirman, que las almas de cierta pureza al realizar el viaje, se convierten en un rayo azul donde le esperan los que serán sus padres en esa nueva vida.

Lo que siempre me ha parecido, después de consultar a varios autores en este terreno, es que muchas veces es posible regresar a una zona geográfica conocida, sin embargo, esto no me parece muy seguro, más bien creo que algo o alguien es quien decide el destino geográfico.

En un experimento de meditación espírita, escuché la narración de quien describe el momento de lo que interpreta como su muerte, y dice que de momento percibió una oscuridad total cuando sintió un dolor fuerte en la garganta.

Al instante al instante le atrajo la atención una luz a lo lejos y literalmente corrió hacia allá, aunque entiende que al decir corrí, lo dice en automático, porque no entiende como es que llegó tan rápido a lo que considera una gran distancia.

En el momento de estar describiendo este asunto, entiende que se introdujo en el cuerpo de la persona que a la fecha se lo presta y poder hablar con nosotros.

Asegura que eso ocurrió al parecer en el instante en que esa persona estaba naciendo y que él se introdujo de manera accidental, afirma que fue muy difícil conseguir comunicarse para decir aquí estoy, yo también.

Desde luego que este asunto lo dejaré pendiente, tal vez en un futuro podamos platicarlo y analizarlo en todo lo que vale y trataré de entender su realidad, mientras tanto, me quedo con este asunto como una excelente historia.

Si el evento del regreso se parece algo a lo descrito en este tema, considero que por si mismo resulta maravilloso, lo cual ayuda a percibir la muerte como un evento normal sin los matices novelescos, o de dolor como lo describen muchos autores, por eso mantengo mi percepción.


martes, 11 de octubre de 2011

El poder de ser feliz


En primer lugar es necesario estar en paz con uno mismo, debo creer en mí, debo recuperar la fe, todos tenemos el mismo poder para ser felices, siempre se puede ser feliz en cualquier lugar, el problema no es el lugar.

El poder de ser feliz esta más cerca de lo que creemos, solo se requiere recuperar la fe, poco a poco, hasta volver a tener esperanzas, ilusiones y alegrías.

Muchas veces, dicen por allí que todo vale la pena, hasta aprender después de muerto, aunque la muerte no existe, bueno, trataré de ser más claro.

Se dice que poseemos un alma que la divinidad nos regaló al nacer, tomamos un cuerpo, que al crecer va madurando, envejeciendo, lo abandonamos y regresamos a lo que identificamos como cielo.

Luego, llega el momento de volver a nacer y así sucesivamente, eso es transmutar, hay una parte que muere y una que nace, es la que libera el alma y luego regresa a su estado natural.

Nuestra alma es siempre la misma, ella es la que vive eternamente, cada cuerpo que tomamos es como un cambio de ropa, lo que vale es lo que se aprende al transitar en cada existencia.

La experiencia de vida es lo que vale la pena llevar dentro del alma, es lo que mueve a comentarios como el siguiente: ¡Que buena alma tienes! Porque vibra, porque brilla con una gran luz.

Esa gran luz tiene un gran valor, ese es el amor, cuando amas y te has dejado amar, es maravilloso, el amor siempre muestra el gran sendero, es el motor que nos invita a seguir.

El amor nunca nos conduce por un mal camino, a veces pensamos que nada hemos aprendido, lo que sucede es que solo se aprende mientras estamos vivos, lo aprendido en otras vidas, permite resolver con mayor facilidad en la vida presente.

Pregunto: ¿Por qué no aprendemos todo en una sola vez? ¿Por qué tenemos que vivir con una mente que nos hace todo mucho más difícil? ¿Por qué no permanecemos solo como almas?

Cuando se vive, se tienen experiencias y al aprender se obtiene felicidad, es posible que no todas las vidas que vive un alma sean las más tristes, ni las más alegres, son pruebas.

Muchas veces al reflexionar en estos asuntos, no se comprende como hacer para vivir sin tantos laberintos, y poder encontrar la salida sin lastimar y sin lastimarnos.

¿Cómo hacer que en mi camino encuentre a alguien interesante, que me acompañe en algunos tramos en cualquiera de los senderos? Que me permita más alternativas y evitar el extravío.

Muchas veces, estar detenido en el tiempo no es retroceder, el asunto es encontrar la claridad, esa claridad siempre existe, todo el tiempo se puede hacer el juego de la vida más fácil.

Cuantas veces perdemos demasiado tiempo buscando la mejor solución, es posible que esa sea la causa del problema, eso ocurre cuando nos comportamos muy exigentes con nosotros mismos, pecamos de meticulosos.

El poder de ser feliz exige no pensar mucho una jugada, hay que poner acción con cierta rapidez, porque la intensión sin acción, se queda en ilusión.

domingo, 9 de octubre de 2011

Mi argumento de vida


Hay quien afirma que cada uno de nosotros escribe su argumento de vida, no entiendo exactamente como ni donde lo escribimos, pero entonces que es lo que origina que nos equivoquemos tanto en el andar de la vida.

De ser cierto lo que se afirma creo que se escriben lugares o tiempos de descanso en los que se pueda disfrutar del paisaje, no creo que todo tenga que ser trabajo y apremios que hacen tan acelerada muchas veces la vida.

Mientras transitamos por los caminos señalados en el argumento, seguramente encontraremos personas que por medio de artificios o por motivos más simples nos llevan por otros lugares que no estaban previstos en el guión original.

Fabrican atajos para obligarnos a compartir sus gustos, solo que la recomendación es ser dueño de uno mismo y que haya la oportunidad de ejercer la libertad que nos entregan desde el momento en que nacemos.

El argumento debe tener bien marcados los caminos a recorrer con el fin de obtener un aprendizaje por los propios medios, es claro que no se puede aprender con experiencias de segunda mano.

Debemos aceptar que en la vida se tiene compañía solo por momentos, aunque muchas veces duele perder algunas amistades en el camino, pero habremos de aceptarlo y seguir adelante como si nada hubiera pasado.

Si alguna relación sobre todo amorosa decide acompañarnos en nuestro camino, es bueno, pero debemos tener en cuenta que esa persona tiene su propio argumento y su propia libertad, de manera que el consejo será: No pierdas tu identidad.

Las escenas de nuestro argumento son variadas y eso obliga a no quedarse quieto en ningún momento esperando a que las cosas, simplemente ocurran, no debemos olvidar que somos piezas del juego de la vida y los resultados se producen en nosotros mismos.

La vida puede ser nuestra amiga o nuestra enemiga, se parece al trato que le demos a un vehículo automotor, todo depende de la manera como lo manejamos.

Muchas veces nos equivocamos al tomar alguna decisión errónea, pareciera que estamos destinados a elegir mal, pero más bien lo que sucede es que perdemos la fe en determinados momentos.

Cuantas veces nos figuramos que algo hacemos de maravilla y hasta presumimos de infalibles y sin embargo, el fracaso nos desmorona y aniquila sin remedio.

Otras veces nos colocamos en el lado contrario y decimos: Tengo miedo, lo que trato de hacer no va a funcionar, soy un fracaso, nunca debí hacer lo que hice, no sirvo para nada.

La pregunta sería: ¿Cuántas veces traté en verdad ser feliz? ¿Cuántas veces dudé de mí mismo que no pude resolver ni los pequeños problemas que me hicieron tan infeliz?

Conservamos tantas cosas negativas en la bolsa de los recuerdos, que no existe argumento de vida, que pueda superar adecuadamente la cantidad de cosas inútiles, que cargamos a diario en el bolso de los desechos.

El primer punto entonces en nuestro argumento de vida será descargar primero esa basura y dejar libre el bolso, de esa forma nosotros escribiremos nuestro argumento de vida con la libertad necesaria, y ser felices como lo indica la fuerza vital de vida.

viernes, 7 de octubre de 2011

Cuando el destino llega

El destino es una abstracción que subyuga, tal vez porque el destino siempre es incierto, o porque en realidad es algo que desconocemos, aunque existen personas que juran que pueden adivinar el destino con solo consultar sus herramientas.

Los asuntos adivinatorios, son algo que siempre he puesto en tela de juicio porque el adivinar es tan relativo, siento que está sujeto a una serie de eventos que nadie puede tener control sobre ellos, por mucho que se lo proponga.

Si el destino tuviera forma humana, seguramente afirmaría que ha sido enviado por el ser supremo, pero el señor destino sería capaz de afirmar que él es quien todo lo ordena y no el ser supremo.

Cuestión de puntos de vista, hay quien dice que el señor destino es quien acomoda los planetas antes de que nazcamos, por eso se le considera como parte de la vida de cada quien.

Algunas historias dicen que el señor destino es quien manda y que nadie se puede escapar de sus brazos, otras creen que pueden desafiarlo y cambiarlo a su antojo, sería bueno saber la verdad ante todo.

Lo importante es que estemos al tanto de todas las respuestas que el señor destino pueda proporcionarnos, a veces, tenemos las respuestas frente a nosotros y no somos capaces de percibirlas, siquiera para entender el mensaje.

Cuantas veces por apatía dejamos de buscar respuestas, nos volvemos inflexibles en muchas etapas de la vida, sobre todo cuando necesitamos un apoyo fundamental por realizar, o por lo menos canalizar una posible solución.

El señor destino debe ser flexible en algunos momentos, pero nunca un tirano, es un personaje que hace su trabajo con cada uno de nosotros, claro que resulta difícil dejar contentos a todos.

Me pregunto entonces: ¿Si el señor destino sabe lo que pasará, debe escribir nuestra historia? Entonces: ¿porqué no acomoda todo y evita que las cosas salgan mal desde el principio?

Tal parece que todo está sujeto a leyes divinas que de ninguna manera podemos cuestionar, si de verdad el señor destino existe, debe ser un funcionario de muy alto nivel y solo se trata de un colaborador subalterno que también se rige por esas leyes divinas.

Me imagino al señor destino recibiendo ordenes superiores: “Traza un camino y arma las piezas que necesita tal persona que va a nacer, porque quiero que se lleve una buena experiencia de vida”.

Deja que elija a quienes van a ser sus padres, cual es el camino que debe seguir, dentro de todos los senderos que le trazaste previamente.

Solo hay un destino pero con diferentes matices, de otro modo se perdería la libertad que es uno de los dones más preciados, todos somos libres en todo momento, lo malo es cuando hacemos mal uso de esa libertad.

Es como tener un mapa de la vida y al observarlo se pueden elegir caminos, el camino se hace al andar, bien o mal, furioso o calmado, lo importante es que los caminos que se recorran sirvan para aprender, con aciertos y errores.

Debemos recordar que si no existiera la oscuridad, la luz no aparecería, sin lágrimas no se puede disfrutar la risa, algunas veces los extremos se juntan, pero sin lo bueno y lo malo no existiría el equilibrio.

Se dice que: El destino está marcado, más bien parece que el mapa está colocado a nuestros pies, y a estudiar, saber como encontrar indicaciones, como atravesar
muros y de esa forma, encontrar la felicidad, con el destino diseñado con nombre y apellido.

jueves, 6 de octubre de 2011

El tiempo y el destino

Siempre he tratado de imaginar, la manara de medir el tiempo, en la otra vida, pero tampoco entiendo la causa, por la que llegan a mi mente este tipo de reflexiones y manifiesto que no siento ningún temor.

Me imagino que se pueden enviar mensajes a los seres queridos, pero tampoco imagino como se puede hacer, quiero pensar que debe ser pon medio del pensamiento o de los sueños.

Tal vez lo que pasa, es que ahora estoy comprendiendo el asunto de los ángeles y todos los seres invisibles a nuestra vista, pero entiendo que de alguna manera debe funcionar para que se cumpla.

Supongo que deben existir maestros que de alguna manera guían a quienes sistemáticamente van llegando a ese mundo, entender como es, que es lo que se debe hacer, no imagino que debamos permanecer callados e inmóviles.

Alguna vez describieron que en ese lugar existen jardines esplendidos, lo cual me agrada, soy un ferviente admirador de todo cuanto existe en los jardines, cuidarlos para mí será un verdadero placer.

Cada flor, será como una señal de que la vida es hermosa en uno y otro plano, pero en el fondo creo que siempre estaré preguntándome sobre la vida de mis seres queridos.

Me pregunto: ¿Qué pasará si al hacer el viaje, por alguna causa me fuera con enojo o simplemente con malos entendidos? ¿Encontraría al maestro adecuado para conducirme con propiedad y poder encontrar mi camino sin contratiempos?

Aunque en esta vida siempre encuentro solución a cuanto problema se me presenta, a veces las resuelvo con dificultad, pero al final siempre se encuentra la mejor solución.

En este momento imagino lo que debe ocurrir, muchas veces al encontrar la solución de un problema sencillo o difícil, me doy cuenta que solo espero el momento apropiado y simplemente surge la solución.

¿Será acaso que sin saber como, he recibido el mensaje de solución por medio del pensamiento o por medio de algún sueño específico donde me indican lo que debo hacer?

En cualquier caso, creo que es aceptable una u otra forma de recepción para aplicar la solución, lo fundamental es obtener la capacidad suficiente para percibir y entender dicho mensaje y aplicar la solución correctamente.

No se, si como lo describen algunos autores, las necesidades a las que estamos acostumbrados en esta vida, allá no existen, es decir, no existe ni frío ni calor, no se experimenta hambre, pues no es necesario alimentarse y tantas otras cosas.

Hay quien asegura que parece que caminan y la realidad es que el desplazamiento es simplemente eso, pensar que se está desplazando y no es exactamente volar, parece que es otra cosa.

Ahora recuerdo que en alguna ocasión alguien me sugirió: Déjate conducir, deja que las cosas sucedan, no trates de forzar nada, la solución a tus problemas ya existe, solo espera a que se cumpla lo que debe cumplirse.

Solo me queda una reflexión: ¿Encontraré a mis seres queridos que partieron antes que yo? Tal vez esa sea la mayor preocupación llegado el tiempo y el destino.

domingo, 2 de octubre de 2011

El justo medio

Desde siempre me he considerado un admirador de la ciencia, primero por los grandes beneficios, aportados para hacer la vida del ser humano muy placentera y eficaz.

Desde hace unos 30 años, un evento ocurrido a mi familia, me entregó en los brazos de los asuntos de un mundo que no termino de conocer, me fascina tanto como la ciencia.

En esta primera década del siglo XXI, las investigaciones científicas en asuntos ubicados junto a la psicología, se han incrementado favorablemente, en la búsqueda de respuestas a todo aquello que parece fantástico o simplemente incomprensible.

Mucho he hablado en estos reportajes con respecto al concepto “alma”, desde el momento en que tuve conocimiento de ello, no he abdicado en la búsqueda de datos que soporten el método científico.

Muchos son los textos que he tenido que estudiar, y a la fecha es muy poco lo que se puede comprobar, como lo indican los últimos descubrimientos, donde algunos científicos han concluido que pudiera, sí existir.

Las pruebas se han realizado en base a los usos y costumbres de México o de su pueblo, sobre todo lo que pudo haber pasado a nuestros antepasados, en los asentamientos teotihuacanos, otomíes, mayas y el resto de nuestro territorio.

Paralelamente, los científicos han hecho su trabajo, intentan descubrir el punto medio entre lo real y científico, con la verdad filosófica que siempre lo ha intentado y jamás conseguido.

Con buena voluntad parece que muy pronto surgirán los datos que permitan recorrer y analizar cada rincón de nuestra patria, con la ayuda de los mismos alumnos, quienes se contratan en funciones de investigación.

Tal vez si habilitamos una retrospectiva de los últimos cien años, sea posible volver a vivir aquellos tiempos, nadie podía imaginar entonces, que seríamos esclavos de todo cuanto se ha descubierto en los últimos años.

Este es el milenio de la comunicación, todo cuanto sucede a nuestro alrededor, lo conocemos casi al instante mismo en que se produce, entonces no veo la razón por la cual deban estar separados los científicos y los psicólogos.

Si ellos se unen, podemos estar seguros de que muy pronto hablaremos del alma, como si se tratara de un dolor de espalda, es decir, se requiere esa comunión de ambas especialidades que nos permita encontrar las mejores respuestas.

Los grandes descubrimientos en el avance de la medicina, se lograron gracias al trabajo de ingeniería: Mecánica, eléctrica y electrónica, junto a la sabiduría en la ciencia médica.

No veo razón por la cual no se puedan poner de acuerdo representantes de la ciencia médica y quienes han dedicado parte de su vida en estudios sobre los asuntos de la vida después de la muerte.

Un terreno que considero fértil y que puede entregar resultados impresionantes, si se trabaja con la seriedad debida y saber que pasa cuando el cerebro deja de funcionar.

Muchos son los relatos emitidos por pacientes que involuntariamente les ha tocado vivir esa experiencia, que han arrojado infinidad de datos, tendientes a descubrir la realidad de lo que ocurre en ese intervalo entre la vida y la muerte.

Con un poco de tiempo más, podríamos saber no solo que es lo que ocurre en momentos como el descrito entre la vida y la muerte, tal vez con un segundo esfuerzo se logre saber que es lo que pasa más allá y encontrar el justo medio.

sábado, 1 de octubre de 2011

La ciencia debe atreverse

La mayoría de los investigadores no se han atrevido a hablar abiertamente sobre el asunto: Alma, la disculpa es porque ese fenómeno rechaza el método científico, pero ya existen muchos datos más.

En los últimos tiempos han surgido estudios serios en los que han encontrado que la coincidencia en los relatos de personas que han experimentado el viaje a l famoso túnel de luz manifiesta puntos de convergencia muy bien definidos.

Algunos científicos lo han bautizado como experiencia de muerte o cercana a la muerte y refieren que han encontrado relatos del túnel cuando el cerebro se encuentra inactivo, por no definirlo como que esta muerto.

Ante tales evidencias, si el cerebro está muerto parece que el paciente no se encuentra dentro de su cuerpo y hasta es capaz de describir todo lo que se practica al cuerpo cuando tratan de regresarlo a la vida.

El caso de un paciente que sufrió un paro cardiaco fue llevado de emergencia al hospital y por fortuna regresó a la vida, tal vez un caso como cualquier otro, sin embargo, cuando regresó a consulta semanas después, narró lo siguiente:

Reconocí a una de las enfermeras y algunas de las personas que intervinieron en el regreso a este mundo y detalló la manera como lo colocaron sobre la plancha del quirófano y lo que cada uno de ellos hizo durante el trabajo de regreso.

Después de esto dicen los científicos que realizaron una encuesta con varios cientos de pacientes que experimentaron padecimientos similares, y coinciden en haber experimentado una sensación de paz interna.

Un alto porcentaje de los pacientes entrevistados, refieren los científicos, mostraron una conciencia lúcida, lo cual los condujo a tomar muy en cuenta los resultados de la experiencia.

Pienso que en esta vida moderna como en la edad media, el científico teme emitir opiniones de resultados que ha comprobado ampliamente, pues, en términos generales existen escépticos que sin prudencia alguna descalificarán lo que no comprenden.

Que difícil debió ser la vida de los pensadores del siglo XVII que nos dejaron legado tan valioso que hoy lo vemos como algo muy natural y los que les antecedieron y los posteriores que han puesto su grano de arena para bien de la humanidad.

Esto que ahora escribo, ha llegado a mis manos y lo recibo con una gran alegría, de antemano declaro que me fascina la ciencia, pero también me fascinan los temas para psicológicos.

Creo que nada impide en estos tiempos investigar lo que la mente nos pida, hoy no existe la santa inquisición por fortuna y la libertad de pensamiento cada día es más amplia, solo quienes están dominados por fanatismos evitan hablar de todo esto.

Felicito ampliamente a las publicaciones que de esto se han ocupado, para usted querido lector, agradezco infinitamente el regalo de su atención de estos minutos, lo que he tratado de transmitir con este escrito está a la vista en varias revistas populares.

Atrévase a leerlas, como lo están haciendo algunos científicos, bien vale la pena conocer más del mundo en que vivimos.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Afectación inocente

He titulado este ejercicio afectación inocente en función del daño que podemos causar de manera involuntaria a nuestros hijos, cuando llega la hora de partir o de cruzar el portón de esta vida hacia la otra.

He tenido noticias de muchos casos, en que alguno de sus hijos, se identifica plenamente con su padre, y el, identificado con alguno de sus hijos, a tal grado que ambos encuentran similitudes en la manera de conducirse.

A simple vista, lo anterior se puede calificar de un beneficio maravilloso, si existiera en toda familia, pensamos que debe ser practicado en toda la sociedad.

Pero en esta ocasión, me permito disentir de esa idea, pues la pequeña estadística que me permití desarrollar, entrega datos poco alentadores y con matices desagradables.

Un común denominador arroja la problemática de que cuando el padre o la madre fallece, el hijo o hija que logró mayor identificación con el fallecido, padece alguna controversia de supervivencia.

Casos donde el hijo o hija que se identificó con el, o la fallecida, comienza a presentar una patología que nunca antes se había manifestado y no existe motivo real cuando se elabora una historia clínica.

Casos de dolores intensos de distintos tipos, o casos de asma en el menor de los casos, de tal suerte que si no se tratan a tiempo pueden permanecer por tiempo indefinido en el organismo del hijo afectado.

Muchos son los psicólogos que se encargan de elaborar un tratamiento profesional y efectivo que me consta, en poco tiempo la problemática desaparece por completo.

Muchas veces por causa del desconocimiento que una familia puede presentar en estos casos, evitan que sean tratados generalmente por “el que dirán” que hace tanto daño o más que la propia enfermedad.

Es tan peligroso no dar atención a este asunto, que muchas veces desencadenan efectos tan nocivos que hasta pueden generar tragedia, lo mejor es canalizarlos de manera profesional.

Empíricamente se pueden implementar algunas acciones, es posible que una de las más importantes sea: Invitar al hijo que se encuentra en ese momento crítico a que trate de descubrir la personalidad que el espejo le refleja.

Invitarle a imaginar como se comportaría el personaje que ha idealizado, ante una situación real y como encontraría una solución real, y como la puede encontrar ese hijo idealizador en tiempo real para el momento actual.

Realizar una serie de ejercicios encaminados a descubrir la verdadera personalidad del fallecido, puede ser otra práctica benéfica, con el fin de no perjudicar a nadie con las resoluciones.

Existen casos donde el hijo sueña al padre fallecido y refiere que lo ha soñado con gesto de enojo y eso le mantiene con etiqueta de culpable, dice el hijo: Mi papá aparece en mi sueño con gesto de enojo, debe ser porque yo fui culpable.

Culpable de no haber hecho las cosas como el lo quería y no se como hacer para que recupere su alegría y mientras no lo sueñe contento me sentiré mal.

Como vemos, la sencillez con que afectamos a un inocente es más seria de lo que parece, porque va más allá de la vida.

martes, 27 de septiembre de 2011

Inteligencia suprema

Inteligencia suprema o sabiduría eterna, los calificativos pueden continuar indefinidamente con el único fin de tratar de explicar lo inexplicable, creo que resulta imposible encontrar el nombre divino que ajuste a cada uno de nosotros.

Es posible que algún día se puedan unificar los criterios que entreguen respuestas que a todos ajusten, sin embargo, lo más importante es el mandamiento que la sabiduría eterna dicta para cada caso en particular.

Uno de esos mandamientos ordena la obligación de honrar con la práctica de la virtud, que ordena hacer el bien por solo el placer de hacerlo y no por el deber de hacerlo.

Sugiere ser amigo del sabio y observar sus preceptos con puntualidad y la inteligencia suprema parece que no se equivoca al declarar que el alma es inmortal, debe tener bases para afirmar tal cosa que ha producido al paso del tiempo discusiones diversas.

Recomienda evitar maldad alguna que pueda degradar a esa alma, e invita a combatir el vicio sin descanso, que se convierte en la puerta de entrada a esa degradación.

La inteligencia suprema dicta que nada debe hacerse en contra de otros, porque ellos pueden hacerlo a ti, lo que conduce a resignarse a la suerte que nos toque y con ello conservar la luz de la sabiduría.

Dice que tenemos que honrar a nuestros parientes y el respeto a los viejos es fundamental, ya que de ellos parte el método para ilustrar a la juventud que a su vez, protege a la infancia.

Uno de los mandamientos más importantes por el significado ordena, amar a la esposa sin limitantes, lo mismo que a los hijos, amar a la patria y acatar las leyes, porque esa es la base de la sociedad, familias respetuosas hacen pueblos respetuosos y respetados.

La inteligencia suprema pide considerar al amigo como si fuera una hechura de nosotros mismos y que el infortunio no me aleje de esos amigos y cuando les toque partir, hacer por su memoria lo que el haría si viviera.

Al mismo tiempo recomienda huir de las falsas amistades que impedirá sucumbir a las pasiones y ser indulgentes con el error de cualquier tipo, para lo cual es necesario escuchar siempre, hablar poco y realizar obras buenas.

Olvidar las injurias, devolver bien por mal, no abusar de la fuerza ni de la superioridad y aprender a conocer a los hombres para conseguir conocerse a sí mismo.

Siempre buscar la verdad, ser justo y huir de la ociosidad, que es la llave maestra de los vicios y las pasiones, que aniquilan a los seres humanos hasta reducirlos al fracaso.

La inteligencia suprema o la suprema inteligencia, recibe muchos nombres, cada cultura, cada pueblo y cada tiempo, ha tratado de bautizar a esa inteligencia con el nombre que le acomoda o con el nombre que le sirve para dominar a sus hermanos.

Lo anterior es algo que cuesta mucho trabajo razonar porque hemos sido educados por medio de normas dirigidas a propiciar el fanatismo y eso es lo que impide el avance social necesario para vivir mejor.

Imaginar la inteligencia suprema como un ser humano creo que es algo criticable, pues, en realidad no me atrevo a darle forma, no imagino su forma, solo creo que existe.