El porqué de los problemas

Por: Julio Torres

Un libro de instrucciones para resolver los problemas no existe, quizás existan manuales de problemas y como se pudieran resolver, pero eso es todo.

Recordemos que los problemas no son vendibles, no hay problemas de segunda mano, por lo tanto, tampoco existe la tienda de problemas usados.

Los problemas son propiedad de quien los tiene y solo el propietario puede resolverlos, los problemas producen desesperación y tocan la frontera del desaliento.

Llegó a mis manos un experimento muy curioso, una persona se colocó en una avenida por donde habitualmente transita mucha gente a toda hora del día, y se propuso hacer una encuesta.

Intentaba descubrir que pensaban las personas cuando les preguntó: ¿Usted porqué trabaja? Y el resultado fue bastante desalentador, nadie le quiso contestar,

Al día siguiente insistió cambiando solo una palabra, ahora preguntaba: ¿Usted para que trabaja?

Todos contestaban que “para pagar la renta”, “para dar de comer a sus hijos”, “para pagar las deudas”, “para tratar de vivir mejor”, y muchas respuestas mas, pero todas en el mismo tenor.

Al tratar de obtener una conclusión, solo encontró un común denominador, nadie trabaja para triunfar en la vida, cuando que el triunfo en la vida debe ser el objetivo fundamental.

Triunfando en la vida, se triunfa en todo, triunfando en la vida se obtiene lo que se desee, triunfando en la vida se consigue la felicidad y consiguiendo la felicidad se consigue todo.

Se puede cuestionar el concepto anterior, no es el triunfo lo que busca la gente, sino el dinero para cubrir los compromisos sin importar el triunfo.

Ante esto, si lo que necesita es  dinero, entonces, primero etiquetaremos ese concepto, y su sinónimo lo entenderemos como riqueza para comprenderlo mejor.

Comencemos por saber como se consigue la riqueza, y solo son dos los factores esenciales para lograrlo, la propiedad y el trabajo.

Quizás en este momento, no tiene propiedades, bueno, permítame decirle que sí posee propiedades, su cuerpo, su talento, su inteligencia y las experiencias vividas son sus propiedades.

Solo necesita conocer el segundo factor para generar la riqueza, se llama trabajo, efectivamente, solo tiene que poner a trabajar la máquina que es su cuerpo, y listo, a producir la riqueza que necesita.

La formula no requiere de una gran preparación, solo la utilización de sus facultades, puestas al servicio de quien lo necesita y ya está solucionado.

La propiedad y el trabajo a cambio de riqueza, la necesaria para el bienestar de los suyos y de usted mismo, no debe buscar las cosas en el lugar equivocado, todo está en usted mismo.

Es importante no olvidar estos conceptos, podemos buscar las soluciones en muchas partes, pero, cualquier solución solo se va a encontrar dentro de nosotros mismos.

Solo nosotros sabemos la magnitud de la necesidad, de tal suerte que puede ser mejor buscar el triunfo, en lugar de la riqueza.

La cara del triunfo, la encontramos dentro y no fuera de nosotros, entonces, vamos a trabajar por un triunfo y no por una riqueza.

El triunfo otorga felicidad, la riqueza no siempre.