domingo, 21 de noviembre de 2010

Leyenda y los salmos

Por: Julio Torres

Se ha dicho que los salmos, son como un resumen de toda la biblia, historia y profecía, doctrina y oración, desde luego para el que presta la debida atención para entenderlos.

Parece que David por medio de lo escrito en los salmos buscó en su tiempo lo que su pueblo debía pensar, sentir y querer con respecto a Dios.

Muchos cabalistas han emitido su pensar con respecto a los salmos y algunos de ellos han dicho que en la forma de recitar los o cantarlos como lo ordena David se obtienen beneficios para casi cualquier queja.

Muchos estudiosos de los escritos bíblicos han hecho una descripción y análisis de lo que en su momento fue la intensión del rey David al diseñar estos cánticos graduales.

Israelí estaba gobernado por reyes pero, a diferencia de los reyes egipcios, asirios o babilonios, el rey hebreo no era considerado un ser divino, sino un representan te de Dios, defensor de los pobres, pastor del pueblo y encargado de encabezar la guerra santa.

Siete son los salmos denominados reales por que describen distintos momentos de la ceremonia de entronización, se cree que no describen nada concreto, que son simbólicos.

Quien era nombrado rey, perdía su antigua identidad y volvía a nacer, recibía en secreto el “protocolo real”, un rollo que de velaba su nuevo nombre y la misión que Dios le confiaba.

Otro cabalista antiguo, describe a cada salmo con poderes curativos, legales y sociales que al paso del tiempo con figuraron una serie de tendencias acertadas o no según el caso.

Tomaré como ejemplo algo que manifestó un estudioso al referirse al salmo 5 que dice fue escrito por David la noche anterior a la batalla que debía enfrentar contra Absalón.

Recordemos que Absalón ambicionaba convertirse en rey, pero debía entonces derrotar a su padre y me parece muy interesante el siguiente canto:

“Tu no eres un Dios que se complazca en la maldad, el malvado no habita contigo, ni los impíos permanecen en tu presencia, aborreces a todos los que obran iniquidades”.

“Tu destruyes a todos los que hablan mentira; del hombre sanguinario y doble abomina Yahvé.
El estudioso a que me refiero, también afirma que este salmo debe “cantarlo”, entiendes rezar lo, el día anterior a que se tenga que enfrentar a un asunto legal.

No pretendo con lo dicho, convertirme en cabalista ni mucho menos, lo que me anima a tocar estos puntos es solo llamar la atención en algo que me resulta interesante.

Hace muchos años que me llamó la atención internarme en estos asuntos por mera curiosidad, pero poco a poco el interés fue creciendo de manera impresionante.

Existen en el mercado muchos textos que de esto se han encargado desde hace muchos años, y me parece que todos ellos cumplen con el objetivo de orientar.

La recomendación entonces, debe ser que si aprecian este tema, con mucho gusto quedan invitados en algunos reportes futuros.

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